Personal que trabaja en tres edificios aledaños a El Alcázar, construcción que se encuentra en riesgo de desplomarse debido a defectos en su construcción, comenzó a ser desalojado desde el medio día hoy por motivos de seguridad.
Trabajadores que cumplen sus servicios en el edificio de la estatal Empresa Nacional de Telecomunicaciones (Entel), en el Museo Arqueológico de Tiwanaku y en el Restaurant Vienna, fueron retirados en un operativo de seguridad preventivo ante la posibilidad de que el céntrico edificio El Alcázar colapse por los graves daños que sufrió en las columnas de concreto que lo sostienen.
“Estamos sacando todo lo esencial”, informó a un periodista de La Razón un alto funcionario de la Empresa Nacional de Telecomunicaciones (Entel), mientras junto a sus compañeros se retiraba de la zona de riesgo. Computadoras y papeles, entre otros materiales de escritorio, fueron llevados hasta un camión que esperaba a una cuadra de esa institución, sobre la calle Federico Suazo.
Similar panorama se observó en el Museo Arqueológico de Tiwanaku, ubicado en diagonal al edificio El Alcázar, sobre la calle del mismo nombre. Ese museo alberga 3.500 piezas precolombinas, entre ellas de la cultura chiripa y wankarani. Según se constató, personal de esa institución empezó a embalar todo lo concerniente al museo.
El lunes, a las 16.30, los habitantes del edificio El Alcázar sintieron un ruido parecido al estallido de dinamita, según versiones recogidas en el lugar. Horas después se constató el daño de una columna del Bloque A de la estructura. Cerca de las 19.00, la Alcaldía y la Policía procedieron a evacuar a las 178 familias que habitaban en los departamentos de la estructura de dos bloques, bautizadas como Torre Córdova y Torre Granada. También fueron evacuadas las 81 oficinas ubicadas en los mezzanines.
Personal del Restaurant Vienna, ubicado casi al lado del edificio El Alcázar, también procedió hoy a desalojar el lugar a pedido de las autoridades del Gobierno Municipal. La calle Federico Suazo aún permanece cerrada al tráfico vehicular por temor a que la vibración producida por los vehículos provoque mayores daños en los pilares del edificio. Policías y militares evitan el acceso a ese lugar.
Al menos cinco infraestructuras aledañas al edificio El Alcázar están en riesgo, según comunicó la Alcaldía.
La Razón 19/12/2012
0 Comments:
Publicar un comentario