Los conductores sindicalizados se reunieron en distintas zonas de la capital paceña para marchar protestando hasta el edificio municipal, ubicado en la calle Juan de la Riva. Antes de llegar a su objetivo, un contingente antimotines impidió que los movilizados tomen el inmueble, por lo que decidieron dejar sus vehículos causando un caos en el centro de la sede de Gobierno anunciando para indefinido.

Mientras los conductores protestan, el alcalde Luis Revilla indicó que espera una propuesta formal por parte de los dirigentes del sector, el mismo que pretenda mejorar el servicio a los usuarios. “Las puertas del diálogo están abiertas, pero sobre la base de una propuesta concreta. Ellos están con actitudes hostiles, se oponen a las propuestas del gobierno municipal, pero al mismo tiempo tampoco proponen absolutamente nada para ver cómo vamos a mejorar el servicio de transporte”, dijo Revilla a la red Erbol. 

Por su parte, Franklin Durán, secretario ejecutivo de la Confederación de Choferes de Bolivia, pidió a las autoridades que se elimine la medida promovida por la Alcaldía paceña, ya que de no hacerlo las medidas de protestas continuarán.  

Desde hace dos semanas el alcalde Revilla lanzó una consulta popular para que la ciudadanía decida sobre la propuesta del ejecutivo municipal. El levantamiento de datos culminará en una semana más.
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