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La Paz, 29 Jul (Erbol).- Las 12 diputadas que trabajan en los pasillos de la Cámara Baja deberán esperar hasta el 2014 para tener una oficina, toda vez que para esta fecha recién está prevista la conclusión del nuevo edificio que albergará a asambleístas titulares y suplentes.
En la actualidad los únicos legisladores que acceden a una oficina son los presidentes de comisiones, los secretarios de comités, las brigadas parlamentarias, las bancadas y la directiva de la Cámara de Diputados, el resto, en su mayoría mujeres, no cuentan con infraestructura fija para desarrollar su trabajo.
El diputado Javier Zavaleta, secretario del comité de Desarrollo Constitucional y Legislación, informó a Erbol que el pasado 17 de julio se lanzó una convocatoria con el fin de que arquitectos presenten sus ideas para la construcción de la primera etapa del nuevo edificio, que deberá albergar a todos los asambleístas titulares y suplentes.
Señaló que se prevé iniciar la construcción del primer bloque de este edificio el segundo trimestre de 2012 y concluir en el 2014, pero no se garantiza que el nuevo edificio pueda albergar a todos los asambleístas, puesto que aún no se conoce la cantidad de oficinas con las que contará esta infraestructura.
Para la construcción del primer bloque se cuenta con 28 millones de bolivianos que han sido producto del recorte de personal y gastos de las cámaras de Senadores y Diputados, además de la Vicepresidencia del Estado.
Se tiene prevista la compra de las viviendas aledañas a la ALP para la construcción de este edificio que ocupará todo el manzano de las calles Ballivián-Comercio y Colón-Ayacucho, y estará divido en varios bloques.
Lo cierto es que las diputadas de pasillo deberán esperar hasta el 2014, cuando ya su gestión esté a punto de finalizar para obtener una oficina, o en su defecto volverse a postular en las elecciones, en caso que no se concluya la construcción del mencionado edificio.
Ante estas afirmaciones, la diputada de Convergencia Nacional, Adriana Gil, señaló que esta es una muestra de discriminación en especial hacia las asambleístas de oposición, puesto que desde el inicio de su gestión no les han dotado de una oficina donde ejercer sus funciones.
Aseguró que la Cámara de Diputados cuenta con los recursos necesarios para la dotación de infraestructura a todos los legisladores, pero por cuestiones políticas las vienen marginando.
En la actualidad los únicos legisladores que acceden a una oficina son los presidentes de comisiones, los secretarios de comités, las brigadas parlamentarias, las bancadas y la directiva de la Cámara de Diputados, el resto, en su mayoría mujeres, no cuentan con infraestructura fija para desarrollar su trabajo.
El diputado Javier Zavaleta, secretario del comité de Desarrollo Constitucional y Legislación, informó a Erbol que el pasado 17 de julio se lanzó una convocatoria con el fin de que arquitectos presenten sus ideas para la construcción de la primera etapa del nuevo edificio, que deberá albergar a todos los asambleístas titulares y suplentes.
Señaló que se prevé iniciar la construcción del primer bloque de este edificio el segundo trimestre de 2012 y concluir en el 2014, pero no se garantiza que el nuevo edificio pueda albergar a todos los asambleístas, puesto que aún no se conoce la cantidad de oficinas con las que contará esta infraestructura.
Para la construcción del primer bloque se cuenta con 28 millones de bolivianos que han sido producto del recorte de personal y gastos de las cámaras de Senadores y Diputados, además de la Vicepresidencia del Estado.
Se tiene prevista la compra de las viviendas aledañas a la ALP para la construcción de este edificio que ocupará todo el manzano de las calles Ballivián-Comercio y Colón-Ayacucho, y estará divido en varios bloques.
Lo cierto es que las diputadas de pasillo deberán esperar hasta el 2014, cuando ya su gestión esté a punto de finalizar para obtener una oficina, o en su defecto volverse a postular en las elecciones, en caso que no se concluya la construcción del mencionado edificio.
Ante estas afirmaciones, la diputada de Convergencia Nacional, Adriana Gil, señaló que esta es una muestra de discriminación en especial hacia las asambleístas de oposición, puesto que desde el inicio de su gestión no les han dotado de una oficina donde ejercer sus funciones.
Aseguró que la Cámara de Diputados cuenta con los recursos necesarios para la dotación de infraestructura a todos los legisladores, pero por cuestiones políticas las vienen marginando.
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