El presidente de la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (CIDOB), Adolfo Chávez, responsabilizó al jefe de Estado, Evo Morales, de que madres y niños marchen enfermos en defensa del Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécuere (TIPNIS).
Señaló que por el “capricho” de Morales en torno a la negativa de desviar el tramo dos de la carretera Villa Tunari – San Ignacio de Moxos, que el gobierno pretende ejecutar en medio del Isiboro Sécure, la macha continuará hacía la ciudad de La Paz pese al cambio de clima y las consecuencias que genera ello en la salud de los marchistas, pero sobre todo en los menores de edad. 
Según el dirigente los indígenas están dispuestos a morir para que sus derechos sean respetados. “Han tomado una posición muy clara, que prefieren morir al lado de sus hijos o el hijo al lado de su madre, justamente por el capricho del presidente que no nos escucha”, lamentó Chávez en contacto con Erbol.
El reporte del enviado especial de Erbol dio a conocer este jueves que el cambio de clima, la mala alimentación y las lluvias son las causas de que los marchistas empiecen a enfermarse, ya que presentan dolores estomacales, infecciones en la garganta y dolores de cabeza, por lo que los indígenas decidieron quedarse en Yolosa.
En tanto, el Primer Mandatario aseveró hoy, en un evento de Huanuni – Oruro, que no es posible una consulta vinculante para la ejecución del proyecto carretero, además de que no es negociable.
Fuente: Erbol

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