Como las instalaciones donde siempre funcionó el gobierno de la República le habrían “quedado chicas” al Jefazo del Estado Plurinacional, ahora se anuncia la construcción de una nueva infraestructura. Con helipuerto propio, por si acaso.
El encargado de dar a conocer la noticia fue el propio Evo Morales, quien a tiempo de justificar el gasto que significará la “Casa Grande del Pueblo” argumentó que el actual palacio representa al “Estado Colonial”.
Aunque no dio cifras sobre el presupuesto que se destinará a tan magna obra, adelantó que ya se habría adquirido una propiedad situada detrás del Palacio Quemado, valuada en 500.000 dólares (¿estaba previsto esto en el Presupuesto General del Estado o es un gasto ilegal?).
El asunto mueve a varias reflexiones. Para empezar, la cosa huele a megalomanía y de la peor, esa que se condimenta con ideología de sabor totalitario, de la que busca “refundar” el Estado con una simbología que denote un nuevo inicio de los tiempos.
En este caso, el palacete a construir dizque “rescatará la cultura, saberes, costumbres originarias y reflejará el proceso de cambio”.
Otro ángulo a tener en cuenta es el del gasto superfluo, en momentos en que apenas se destina el 3% del presupuesto a educación, para dar un ejemplo. Gasto que, esperemos, no venga inflado como el del famoso avión presidencial.
Lo del helipuerto es lo más sintomático del tema. ¿Habrá nacido la idea del nuevo palacio cuando Morales se vio “sitiado” por la marcha indígena de la CIDOB en octubre pasado?
Evo I, monarca electivo coronado en Tiahuanaco por el narco-amauta Mejillones, quiere tener su propio Versalles…
notishots@gmail.com
http://eju.tv
0 Comments:
Publicar un comentario