El presidente en ejercicio Álvaro García Linera lamentó el martes que los dirigentes de la Central Obrera Boliviana (COB) no asistan al diálogo convocado por el Gobierno para debatir el incremento a las rentas de jubilación y así evitar problemas sociales y pérdidas económicas al Estado. 

  En conferencia de prensa dictada en el Hotel Los Tajibos de Santa Cruz, García Linera sostuvo que el rechazo de la COB de reanudar la mesa del diálogo demuestra la posición radical de ese sector de los trabajadores. 

  'Lamentamos el rechazo, que se vea ante la opinión pública quién tiene la razón, quién está dispuesto a sentarse a la mesa, quién exhibe sus cartas con transparencia, nosotros defendemos a los pobres a los humildes que ganan poco y algunos dirigentes que están defendiendo a algunas personas que ganan mucho, esa es la gran diferencia que tenemos con algunos dirigentes, ellos defienden a los que ganan más de 15.000 bolivianos', manifestó.  

En esa dirección, García Linera volvió a convocar a los dirigentes de la COB a deponer esa actitud y a defender los intereses de la mayoría de los trabajadores, 'no sólo de unos cuantos'.  

La COB reclama una renta de jubilación de hasta 8.000 bolivianos para los mineros que aportaron 35 años y de 5.000 bolivianos para otros sectores; en contrapartida, el Ministerio de Economía planteó un máximo de 4.000 para el sector minero y de 3.200 para los demás asalariados. ABI

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