En votaciones casi simultáneas, la Cámara de los Representantes y el Senado sancionaron los tres acuerdos con apoyos de demócratas y republicanos. Ahora deben ser ratificados por el presidente Barack Obama. Se comenzarían a implementar en los próximos seis meses. La Casa Blanca espera que ayuden a revitalizar la economía
El Tratado de Libre Comercio (TLC) con Colombia fue respaldado por 262 votos contra 167 en la Cámara de Representantes y por 66 contra 33 en el Senado; el referente a Panamá tuvo un resultado positivo de 300 a 129 en la Cámara baja y 77 a 22 en la alta; el de Corea del Sur, en tanto, obtuvo 278 votos a favor y 151 en contra en primera instancia, y una diferencia de 87-15 en la segunda.
Estos tres acuerdos fueron negociados y firmados originalmente por el anterior presidente, George W. Bush, primero con Colombia, en 2006, y al año siguiente con Panamá y Corea del Sur. Desde entonces, republicanos y demócratas se trenzaron en discusiones sobre sus implicancias, lo que demoró su sanción, hasta ahora.
Las principales resistencias para aprobar los acuerdos estuvieron del lado del partido gobernante, que puso reparos con el fin de que se garantice que los trabajadores estadounidenses afectados por los TLC reciban un programa de ayuda a la reconversión profesional conocido como TAA, que finalmente fue aceptado por la oposición. Aunque en un primer momento el presidente Barack Obama pareció respaldar la postura que mantenían varios de los congresistas demócratas, el gobierno sorprendió semanas atrás impulsando una votación pronta, en aras de estimular la economía del país, que no logra recuperarse de la crisis.
Con la implementación de los acuerdos, que podrían comenzar a regir en los próximos seis meses, los Estados Unidos esperan aumentar sus exportaciones en unos 12 mil millones de dólares, el 90% de las cuales resultaría del comercio con su poderoso socio asiático. Con Colombia y Panamá, los beneficios serán mucho más modestos, de poco más de 1.000 millones de dólares, según cálculos oficiales.
Analistas han observado que los acuerdos representan para el sector agropecuario una última oportunidad de recuperar mercados, particularmente en Colombia, que está orientando cada vez más sus compras de insumos primarios a Canadá, Brasil y Argentina. Para los dos países latinoamericanos, que ya exportaban cerca del 90% de sus productos libres de aranceles a los Estados Unidos, los TLC aparecen también como una buena oportunidad para zafarse del creciente dominio de las inversiones chinas.
El tratado más importante para los Estados Unidos, el de Corea del Sur, podría significar la creación directa de 70 mil puestos de trabajo, según las estimaciones de la Oficina del Representante Comercial estadounidense (USTR).
Junto al TLC con Colombia se aprobó igualmente la renovación de las preferencias arancelarias andinas (ATPDEA), que beneficiará a Ecuador.
Los Estados Unidos tienen, hasta la fecha, acuerdos de libre comercio con 17 países, entre ellos, México, naciones de América Central, República Dominicana y Perú.
Fuente: AFP
0 Comments:
Publicar un comentario